El Derecho Penal no es solo un conjunto de normas que castigan conductas. Es, en esencia, la última barrera del sistema jurídico para garantizar el orden social y la protección de los derechos fundamentales. Dentro de ese sistema, la figura del abogado penalista Girona cobra una relevancia esencial, no únicamente por su conocimiento de la ley, sino por su capacidad para equilibrar técnica jurídica y sensibilidad humana.
Entre los despachos especializados en la provincia, GPS Penal representa un ejemplo de cómo el ejercicio penalista puede ser concebido como una disciplina rigurosa, enfocada exclusivamente en la defensa y acusación penal, y ajena a planteamientos generalistas.
Delitos de salud pública: más allá del estigma
Los procedimientos por delitos contra la salud pública son, en muchas ocasiones, tratados socialmente desde el prejuicio. Sin embargo, desde el punto de vista penal, se trata de causas especialmente complejas: implican una interpretación precisa del tipo penal, un análisis exhaustivo de la legalidad de las pruebas y una revisión constante de la jurisprudencia sobre proporcionalidad de las penas.
En este ámbito, la actuación de un abogado penalista como los que conforman GPS Penal se centra en desmontar construcciones policiales poco fundamentadas o en evidenciar vulneraciones procesales que puedan conducir a la nulidad de actuaciones.
Economía, fraude y responsabilidad penal
La progresiva complejidad del mundo empresarial ha traído consigo un aumento de los delitos económicos. Aquí, el abogado penalista ya no se limita a argumentar jurídicamente: debe comprender estructuras societarias, identificar flujos financieros sospechosos y colaborar con peritos que aporten solidez probatoria a la estrategia procesal.
GPS Penal, por su perfil técnico, ha desarrollado una línea de trabajo centrada en la defensa de empresarios, administradores y particulares acusados de estafa, blanqueo, falsedad documental o apropiación indebida. Cada caso exige una lectura específica, no solo de los hechos, sino de su contexto económico y contractual.
Violencia de género: el reto jurídico y humano
Abordar jurídicamente un procedimiento de violencia de género es enfrentarse a uno de los mayores desafíos éticos del abogado penalista. No hay margen para la indiferencia, pero tampoco para la precipitación. La intervención exige precisión en los hechos, conocimiento de los protocolos de protección y capacidad para actuar bajo presión.
La defensa —o acusación particular— requiere un equilibrio entre firmeza técnica y sensibilidad. GPS Penal ha trabajado en numerosos procedimientos de este tipo, adoptando un enfoque donde lo humano y lo jurídico no se excluyen, sino que se complementan.
Corrupción: entre lo político y lo penal
Los delitos de corrupción, como la malversación o el cohecho, no solo afectan a personas concretas. Afectan a la confianza en el sistema. Por eso, la figura del abogado penalista en estos casos debe ser especialmente prudente, minuciosa y resistente a la presión externa.
GPS Penal ha asumido casos con implicaciones mediáticas y administrativas, enfocándose en una lectura desapasionada del expediente: técnica probatoria, fiscalización del procedimiento y lectura crítica del comportamiento de la administración implicada.
Los delitos contra el patrimonio: defensa de lo cotidiano
Aunque muchas veces relegados a un segundo plano, los delitos patrimoniales —hurtos, robos, daños, extorsión— constituyen una parte central del trabajo diario de los juzgados penales. Aquí, el papel del abogado penalista es devolver dimensión jurídica a lo que a menudo se percibe solo como conflicto vecinal o de baja intensidad.
La estrategia en estos casos pasa por desactivar imputaciones genéricas, identificar inconsistencias en la prueba o explorar salidas alternativas como la conformidad o la reparación del daño.
GPS Penal y la especialización como principio
En un ecosistema jurídico cada vez más fragmentado, la especialización no es solo una ventaja competitiva: es una necesidad. GPS Penal ha apostado desde su origen por una única vía: el Derecho Penal. Esa decisión permite un conocimiento profundo de los procedimientos, una mayor familiaridad con los juzgados de Girona y una agilidad en la toma de decisiones estratégicas.
El abogado penalista en Girona, cuando actúa desde la técnica, la experiencia y la integridad, no solo defiende a una persona. Defiende, también, la credibilidad del sistema penal.
